�Te sientes a veces insignificante? Observa que tan POCO IMPORTANTE fue el gran Rey David durante el comienzo, como vemos en la primera lectura de hoy. ��l fue tan poco importante que su pap�, Jes�, ni siquiera lo invito al gran sacrificio ceremonial de Samuel! O quiz�s �l fue demasiado valioso en el trabajo de arrear ovejas como para ser considerado importante para algo m�s. Jes� ni siquiera informo a Samuel de la existencia de David cuando el hombre santo pidi� ver a todos sus hijos.
�Si te sientes excluido, ignorado, olvidado, desvalorizado o poco apreciado, toma valor! "la mirada de Dios no es la del hombre, porque el hombre mira las apariencias pero el Se�or mira el coraz�n". Si t� coraz�n est� con Dios, si t� coraz�n adora servirlo, si t� coraz�n conf�a en Dios para que haga lo que es mejor para tu vida, y si t� coraz�n quiere ser obediente a sus maneras, Dios te levantar�. Dios, de hecho, ya est� prepar�ndote para que hagas algo importante. 
�No subestimes lo importante que eres para �l en este momento! Las responsabilidades que tienes hoy son muy importantes para el reino de Dios. Incluso si todo lo que est�s haciendo es ganar dinero en un trabajo secular para poner los alimentos en tu mesa y un techo sobre t� familia, eso es extremadamente importante para Dios. Si haces m�s que cuidar a los ni�os que �l te ha dado, la importancia de lo que est�s haciendo no se puede medir.
�Pero debes de estar listo! Lo qu� est�s haciendo hoy es una preparaci�n para una unci�n especial que Dios te dar� en un sorprendente ma�ana. �C�mo lo s� yo? Porque esa es la manera en que �l trabaja todo el tiempo. El utiliza todo de hoy para prepararnos para una futura misi�n, aunque no estemos enterados de que estamos siendo preparados, para que podamos hacer m�s y m�s obras grandes para su reino.
El Se�or tiene mucha necesidad de tus regalos y talentos, experiencias y habilidades, entrenamiento y sabidur�a. No hay nadie m�s, que puede ofrecer al reino de Dios exactamente lo que t� tienes para ofrecer. �l lo puede poner todo a muy buen uso. �Y �l quiere hacerlo! �Lo est� planeando! Pero con demasiada frecuencia decimos que no; fallamos en entender cu�nto ya nos ha preparado, y as� que nos sentimos intimidados por las posibilidades. Necesitamos confiar en Dios en vez de en nuestra comprensi�n limitada.
Considera esto: �Si en cien a�os fueras canonizado como un santo, de qu� especialidad serias patr�n? No te detengas en contestar esta pregunta. Incluso si no eres canonizado oficialmente, ya de hecho te est�s dirigiendo al cielo gracias a t� amor por Cristo y tu deseo de servirlo. �Qu� es lo que te pedir�an las personas en la tierra que pidas cuando alcances el trono de Dios?
Para esto es para lo que has sido ungido ahora: Servir a Dios con tu vida aqu� en la tierra. 
Reflexi�n de la Buena Nueva
Martes de la Segunda Semana del Tiempo Ordinario
17 de enero, 2012
Esta reflexi�n fue copiada con permiso de la autora, Terry Modica, y es utilizada bajo la responsabilidad de grupo cat�lico Reflexiones para el Alma de Miami Fl. Fue publicada por Ministerios de La Buena Nueva, http://gnm.org , registrada en el registro de propiedad literaria (c) 2012. Para obtener permiso para re enviar este o imprimirlo o copiarlo, vaya a Derechos de autor
� 2012 por Terry A. Modica