Mensaje del Párroco P. Aaron Pierre, S.J.
“Cuando una puerta se cierra, otra se abre.” Este dicho cobra un significado profundo con la inauguración del Año Jubilar 2025 por el Papa Francisco al abrir la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro. Esta puerta, que simboliza a Cristo como el camino hacia la salvación (Juan 10:9), nos recuerda que cada transición, cada puerta cerrada, es una invitación de Dios a avanzar hacia nuevas oportunidades llenas de gracia.
El tema del Jubileo, “Peregrinos de Esperanza,” marca nuestra dirección para este año. Como peregrinos, caminamos con gratitud por las bendiciones pasadas y confiamos en que Dios está preparando nuevas puertas de gracia y posibilidad, incluso cuando el camino no está claro. Esta confianza nos sostiene mientras llevamos tanto las alegrías como los dolores del año pasado hacia este nuevo comienzo. La Puerta del Jubileo no es solo un inicio simbólico; nos llama a examinar nuestro corazón, renovar nuestra confianza en Dios y avanzar con fe.
Oremos por el espíritu de esperanza que este Jubileo nos inspira. Que tengamos el valor de cruzar las puertas que Dios nos abre, confiando en Su plan. Juntos, abracemos la promesa del Jubileo: que en Cristo, cada final se convierte en un comienzo, y cada puerta nos acerca más a Su amor. Que este nuevo año nos traiga paz, alegría y un renovado sentido de esperanza para todos. ¡Feliz Año Nuevo!
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