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AGOSTO 2025 CARTA
Muchos dicen creer en Dios, pero pocos están dispuestos a obedecer. ¿Por qué digo esto? Bueno, te responderé. Creer en Dios nos lleva a vivir en obediencia. Vivir en obediencia requiere acción. ¡Creo y actúo! Creer en Dios nos lleva más allá de simplemente decirlo con la boca. Para explicarlo mejor, es importante que lo entendamos. Creer en Dios implica acción. Creo, y porque creó, la acción proviene de lo que creo. Ten esto claro.
Tomemos un momento para reflexionar y meditar en esto: ¿creo realmente en Dios? Porque si creo en Dios, ¡esto me lleva a obedecer su palabra! Si creemos, nuestras vidas se transformarán para vivir según el llamado del Señor. Esta es la evidencia y el resultado de creer: la transformación en nuestras vidas. Estas obras se reflejan en nuestras vidas solo si vivimos según su palabra. Creer se manifiesta en nuestras vidas al caminar con el Señor. Este camino es angosto, y no todos quieren caminar por él. El camino angosto nos separa de las cosas de este mundo. Esta separación solo puede ocurrir en nuestras vidas cuando creemos en la palabra y la ponemos en práctica. Recuerda esto: ¡si creo, obedezco! ¡Caminar con el Señor requiere fe!
En la Biblia, tenemos muchos ejemplos de personas que creyeron, y también vemos el resultado de simplemente creer: creer los llevó a actuar. ¡Se necesita fe para obedecer!
Un ejemplo que vemos es la vida de Abraham. Abraham creyó a Dios y su fe lo llevó a obedecer. Podemos ver esto en Santiago No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? 22 ¿No ves que la fe actuó juntamente con sus obras, y que la fe se perfeccionó por las obras? 23 Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.
Si simplemente escuchamos la voz de Dios, cumplimos con lo que Él nos pide. Dios está ahí para obrar en nuestras vidas, porque hemos tomado la iniciativa de hacer lo que Él nos ha exigido. Él responde según nuestra fe, plenamente depositada en Él. ¡Eso es fe en acción! Podemos ver nuestra posición si realmente creemos en lo que el Señor nos pide. ¡Si creemos, actuamos!
No podemos decir "Creo" si no va acompañado de obediencia. Si reflexionamos sobre esto y somos sinceros, veremos nuestra posición si realmente creemos en el Señor en todo.
Para la salvación, debemos creer que Jesús es el Hijo de Dios y que murió por nuestros pecados. Primero, cada persona debe creer personalmente para salvación.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe. Efesios 2:8
Para sanar es necesario creer, como la mujer con el flujo de sangre tocó el borde de su manto. Tocó su manto y quedó sana.
Si tocare solamente su manto, seré salva. Mateo 9:21
Para que haya provisión, necesitas creer que Él es tu proveedor.
Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Filipenses 4:19
Para servir al Señor, necesitas creer. Los discípulos tuvieron que creer que Jesús los había enviado con autoridad para predicar el evangelio. Para el llamado que el Señor te ha dado, debes creer que Él es quien te llama.
Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Mateo 10:5-7
Por eso es importante conocerlo personalmente, para que puedas creer en Él para lo que necesites en tu vida.
¿Qué te pide el Señor que hagas? ¿Necesitas sanidad? ¿Te llama el Señor a servirle? ¿Necesitas provisión?
En el Reino de Dios, todo es por fe. El Señor está disponible para nosotros solo si creemos en Él para lo que necesitemos en nuestras vidas.
Recuerda, todo el Reino de Dios está disponible para ti. ¡Solo cree!
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