| | Sabemos que los padres tienen muchos sentimientos cuando envían a sus hijos a lo que a veces es su primera experiencia escolar. ¿Están listos? ¿Saben todo lo que necesitan saber? ¡Estas preguntas y sentimientos son completamente normales! Lo que es importante recordar es que las habilidades y experiencias únicas de su hijo son las que lo convertirán en una parte integral de su familia en el aula. El comienzo del año escolar se centrará en aprender lo que le interesa a su hijo, lo que lo hace especial y enseñarle las rutinas y expectativas del aula. También puedes desarrollar estas mismas habilidades en casa. A menudo se piensa que las rutinas diarias son solo actividades de "mantenimiento": hora de comer, hacer mandados, prepararse para ir a la cama, tomar baños. Pero estas acciones cotidianas son ricas oportunidades para apoyar el aprendizaje y el desarrollo de su hijo, mientras se divierte. Las rutinas ofrecen la oportunidad de desarrollar la confianza en uno mismo, la curiosidad, las habilidades sociales, el autocontrol, las habilidades de comunicación y más. Pruebe algo como el siguiente ejemplo la próxima vez que usted y su hijo realicen una rutina diaria juntos.
Por ejemplo, las compras de comestibles:
Midori (2 años) y su madre recorrieron el supermercado. Midori señaló las manzanas y su madre dijo: "Mira las manzanas rojas y las manzanas verdes. ¿No se ven deliciosas?" Extendió una para que Midori la tocara: "Siente lo suaves que son". Luego tomó una bolsa de plástico y se volvió hacia Midori: "¿Por qué no me ayudas a elegir algo para llevar a casa?" Juntos, contaron cinco manzanas y las pusieron en la bolsa. Midori hizo todo lo posible para ayudar, ¡pero esas manzanas eran difíciles de sostener! Se necesitaron dos manos para meter uno en la bolsa. "¡Buen trabajo!", dijo su madre, "Gracias por ayudar".
Aquí, una simple interacción en la sección de frutas y verduras abrió las puertas para practicar habilidades lingüísticas, turnarse, hablar, usar los sentidos y aprender sobre números. También le brindó la oportunidad de nutrir la confianza en sí misma y la autoestima de Midori, ya que su madre le hizo saber que su pensamiento. También le brindó la oportunidad de nutrir la confianza en sí misma y la autoestima de Midori, ya que su madre le hizo saber que sus pensamientos e intereses eran importantes. La madre de Midori también le hizo saber que era capaz de hacer cosas importantes, como elegir y embolsar las manzanas.
Las rutinas proporcionan los dos ingredientes clave para el aprendizaje: las relaciones y la repetición. Por lo tanto, disfrute de estos momentos "ordinarios" con su hijo. Si se divierte contigo, ¡también está aprendiendo!
Haga clic en el enlace para obtener más información sobre los beneficios de crear rutinas: Creando rutinas para el amor y el aprendizaje |DE CERO A TRES.
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