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Queridos Asistentes Pastorales de Formación en la Fe y Catequistas:
Con gran alegría celebramos muchas solemnidades durante este mes, dedicado a la Virgen María. El 19 de mayo se celebrará la fiesta de Pentecostés, que nos recuerda cómo el Espíritu Santo actuó en la vida de los Apóstoles.
En esta ocasión, quiero resaltar y comunicar que culminamos nuestros retiros de Confirmación arquidiocesanos en los que 425 jóvenes y 95 adultos asistieron. En colaboración con el departamento de Pastoral Juvenil, y con la participación de Maria Murphree, Sor Chris Still, OSF, el P. Carlos Orozco, y el P. Justin Ryan, y la coordinación de logística por parte de Joseph Tancioco y Lisa Hillyard, se proporcionó un espacio para que los jóvenes se reunieran con otras parroquias, oraran y compartieran experiencias de su fe. La arquidiócesis también es muy afortunada porque cientos de jóvenes más han recibido o recibirán el Sacramento de la Confirmación en los próximos meses.
Además, aproximadamente 1.300 personas más entraron en plena comunión con la Iglesia Católica en la Misa de la Vigilia Pascual. Esto es un reflejo del arduo trabajo de los coordinadores de RICA que acompañaron, catequizaron y prepararon a todas estas personas para que conocieran y aceptaran la fe. Este año fue excepcional. Demos la bienvenida a todos estos neófitos.
Recordemos que, en la fecha de nuestra Confirmación, recibimos Sus siete dones: Sabiduría, Entendimiento, Consejo, Fortaleza, Conocimiento, Piedad y Temor del Señor. Estos dones espirituales nos ayudan a crecer en virtud, oración y nos orienta hacia la santidad. Después de recibir al Espíritu Santo, los apóstoles vencieron su miedo y comenzaron a evangelizar a todas las personas de todas las naciones.
Durante esta fase de Compañeros en el Evangelio, oramos al Espíritu Santo para que nosotros, como catequistas, tengamos el coraje de continuar evangelizando y ser instrumentos de esperanza, resiliencia, unidad y apoyo mientras oramos al Espíritu Santo con la oración de San Agustín:
"Respira en mi, Oh Espíritu Santo,
Para que mis pensamientos puedan ser todos santos.
Actúa en mí, Oh Espíritu Santo,
Para que mi trabajo, también pueda ser santo.
Atrae mi corazón, Oh Espíritu Santo,
Para que sólo ame, lo que es santo.
Fortaléceme, Oh Espíritu Santo,
Para que defienda, todo lo que es Santo.
Guárdame pues, Oh Espíritu Santo,
Para que yo siempre pueda ser santo. Amén."
Carlos Carrillo
Director de Formación en la Fe
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