SEPTIEMBRE 2020 CARTA MENSUAL
Como creyentes, debemos creer y tener la expectativa que las señales siguen cuando predicamos y compartimos la palabra de Dios, el Evangelio.
Después de la Resurrección, Jesús mandó a los discípulos y les dijo: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”. Los discípulos siguieron sus mandatos y experimentaron que las señales siguieron la predicación del Evangelio.
Marcos 16:15-20
15 Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.
16 El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.
17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.
El Señor trabajo con ellos y confirmo la palabra a través de las señales que la acompañan. Cuando se predica la verdad, el Señor respalda Su mensaje y a Su mensajero con señales y prodigios.
Esto es para cada creyente, "Y estas señales seguirán a los que creen". Tenga una gran expectativa de que cada vez que comparta la verdad del Evangelio, sucederán señales y prodigios.
1 Corintios 2:1-5
1 Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.
2 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.
3 Y estuve entre vosotros con debilidad, y mucho temor y temblor;
4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder,
5 para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.
La predicación de Pablo no fue para agradar a los hombres o llamar la atención sobre sí mismo como muchos lo hacen hoy, su predicación fue en demostración del espíritu y el poder. Para mí eso son señales y prodigios.
Espere la manifestación del Espíritu Santo y Poder, no para cumplir con su propia agenda, sino para que se establezca la Gloria de Dios y Su Reino, las personas sean sanas y almas se salven.
1 Tesalonicenses 1:5
5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros.
Pablo estaba diciendo, cuando predicamos el Evangelio, sucedieron milagros y las personas fueron salvas.
Ore para que cuando comparta el Evangelio, le sigan señales y prodigios.
Lucas 10:1,9,17
1 Después de estas cosas, designó el Señor también a otros setenta, a quienes envió de dos en dos delante de él a toda ciudad y lugar adonde él había de ir.
9 y sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: Se ha acercado a vosotros el reino de Dios.
17 Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre.
Los setenta tuvieron éxito en la predicación del Evangelio, la confirmación de la palabra de Dios con señales y prodigios, hasta los demonios se les sujetaron, en el nombre de Jesús.
Hechos 5:12-15
12 Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón.
13 De los demás, ninguno se atrevía a juntarse con ellos; mas el pueblo los alababa grandemente.
14 Y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres;
15 tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos.
Las señales y maravillas se sucedieron en el ministerio de la iglesia primitiva, la iglesia de hoy debe ver y experimentar lo mismo, para la gloria de Dios.
Hebreos 2:4
4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.
El Señor, Él mismo dando testimonio (confirmando) la predicación de su palabra, el evangelio, con señales y prodigios.
Donde se predica el Evangelio, el Señor está presente para confirmarlo con señales y prodigios. Amén