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Margarita Mendoza
The Observer
9 de enero de 2025
"SAN CARLOS—En la zona de Fox River Valley, las madres que buscan ayuda espiritual y material pueden encontrarla, además de un sentido de esperanza, en la parroquia de St. John Neumann.
Gracias al ministerio Camina con madres necesitadas, las madres reciben apoyo durante el embarazo y después de la etapa de gestación.
En casi dos años del ministerio Camina con madres necesitadas, la comunidad de St. John Neumann ha ayudado a 'unas 60 madres', afirma Susana Morones, coordinadora del servicio de acercamiento y de Respetemos la Vida de la parroquia. El programa actualmente tiene capacidad para ayudar a 40 madres.
'Nuestro principal objetivo es acompañarlas, hacerles saber que no están solas y que nosotros, como Iglesia Católica, estamos aquí para cuidarlas y protegerlas', declaró Morones.
Therese Stahl, directora de la oficina de Evangelización de la vida y la familia, afirma: 'La comunidad de St. John Neumann acoge a las madres en crisis de una manera inspiradora... La parroquia lleva el Evangelio de la Vida a todos'.
'Nuestro sueño para todas las parroquias de la diócesis es poder discernir las necesidades de las madres y las familias en cada comunidad y ver de qué manera cada parroquia puede acompañarlas de forma radical.
Cuando una madre contacta a la parroquia en busca de ayuda, primero recibe una canasta personalizada para darle la bienvenida a su hija o hijo. Estas canastas proporcionan lo esencial, como ropa, pañales, champú y 'todo para darle la bienvenida al nuevo bebé', dice Morones. Además, 'incorporamos diferentes ministerios de nuestra parroquia: un rosario del ministerio del Rosario, una manta de bebé de nuestras tejedoras de Neumann', explica.
Después de la bienvenida, la madre y el niño se inscriben en el programa durante dos años para recibir la ayuda que necesiten...
Susana Morones pregunta con frecuencia a las madres de Camina con madres de qué manera la parroquia puede ayudarlas. El ministerio ayuda a pagar el alquiler y las facturas.
También ofrece otro tipo de ayuda: ayuda espiritual.
El otoño pasado, algunas madres pidieron bautizar a sus hijos. Como hablaban español, la parroquia Santa Rita de Casia, en Aurora, dirigida por el administrador parroquial, el padre Juan Ayala, les abrió las puertas.
Se corrió la voz y, en poco tiempo, más personas quisieron bautizar a sus sobrinos, sobrinas y familiares. Después de que las familias se prepararan para el bautismo, el padre Alexander Suárez, vicario parroquial, bautizó a 16 niños el 2 de noviembre de 2024. St. John Neumann patrocinó la celebración y proporcionó pasteles. 'Fue una lluvia de bendiciones para estas familias', dijo Morones...
'Quieren volver a la Iglesia y acercar a sus hijos a la fe', afirma.
Todas las madres y niños del programa reciben atención y compasión, pero un testimonio ha quedado grabado en la memoria de Morones. Una mujer le dijo: 'Si no fuera por ti, mi hija no estaría viva', porque su familia quería que abortara.
Esa cita resume por qué el programa Camina con madres acepta a todos. 'Estamos aquí para ellas. No hacemos preguntas, les mostramos quiénes somos, y Dios hace el resto', concluye Morones".
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